18/2/20

Texto del 18/02/2020

Hoy salí temprano de casa, con mi mochila cargada de pertenencias, materiales mas que sentimentales, pero en ella traía esta agenda que la uso de cuaderno, el que hace un tiempo la compre en alguna librería  para escribir aquí un poco de este viaje.
Nunca lo había usado, y como de costumbre, me gusta escribir mucho en la primera hoja de todo cuaderno. Es como el inicio de algo, algo nuevo tal vez?

Acá estoy en este lugar que tiene un principio pero no se ve el final, allá lejos se puede ver algún barco pero no se si es un barco en si, estoy en la playa lugar que conocí hace unos meses de casualidad, sabia que existía pero no le daba mucha importancia, y luego fui con mi che-chito y se volvió poco a poco en mi lugar favorito. Sentada rodeada de esta arena que poco a poco se me mete dentro de mis zapatillas y dentro de mis pantalones, sentada acá me recordó ese día que vine con el, esa noche, entre abrazos, risas, viento, frio, se podía sentir el calor entre nosotros... y mucho calor. Recuerdo hasta lo que le dije esa noche, recuerdo cada beso de el, y cerrando los ojos lo siento tan real. 
Extraño lo que me hacia vivir con su amor, con sus sonrisas, y sus besos. Extraño que me hacia poner nerviosa en cada salida que teníamos y que me gustaba. 
Ahora que recuerdo hubo un día que exploto y me dijo todo de una, sin peros en la lengua, sin vueltas, ahí entendí que el era igual que yo, esa manera de mandar un mensaje sin leerlo dos veces y decir realmente lo que pasa o sentirlo... después me decía que no era tan así. Pero si, si era así... estaba preocupándome por todos, como siempre, cuando realmente lo que me importaba lo estaba dejando de lado, ahí entendí que un día a las cosas las tenes y otro día no... por que se van, terminan, porque se cansan. 
Salí corriendo a decirle lo que me pasaba, lo que sentía, y me senté al frente de el a largar todo lo que estaba acumulando también, vi sus ojos que miran y dicen todo, nos mirábamos y poco a poco llorábamos sin soltar de todo esas lagrimas, que en un momento ya las tuve que soltar porque me faltaba el aire. 
Esa conexión, ese amor, juro por Dios que no lo vi vi con tanta intensidad, y que me encanta, y que me gusta y que quiero mas.
No puedo decir que antes no la tuve... porque le estaría faltando el respeto a quienes pasaron antes por mi vida. Pero hay algo en el que sin dudas lo hace distinto al resto y es eso que somos juntos. Diria magia, pero no se, yo hoy puedo decir que fue el hombre que mas mariposas en las panza logro durante dos meses en mi, las mariposas mas lindas y las que mas cosquillas me hicieron.
Ahora sentada acá, disfrutando el estar sola, escuchando la banda que me gusta, escribiendo (como para hacer algo) claro esta que nunca voy a poder no estar haciendo literalmente nada, me aburro, necesito hacer algo y ya planeando en la cabeza que otra cosa puedo hacer en un rato o no se mañana, esta faceta de la soledad es nuevo en mi, siempre trato de estar con alguien, pero recuerdo que en Argentina siempre me gustaba quedarme sola en casa y que lo disfrutaba. Y acá es como que no encuentro el momento, o tal vez no me lo estoy permitiendo, que tal vez esta ultima es la mas acertada de todas. 
Sera por temor? Le tengo miedo a algo? A quedarme sola? Quien me dejaría sola? Me las pregunto en voz alta mientras las escribo y todas las respuestas son NO. No le tengo miedo a nada, ni siquiera a la muerte. 
Pero porque no permitirme hacer lo que quiero, en el lugar y en el modo que yo quiero, porque no estoy dándome el tiempo que me merezco. La verdad que no se. Y el planificarlo para luego no hacerlo, tampoco tiene ningún sentido o si?
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Mientras el sol me pega en la cara, el viento me vuela el pelo y el reproductor me pasa el tema que menos me gusta de mi carpeta, miro para el cielo, hay muchas nubes, lloverá en pocas horas tal vez; o tan solo es un intento mas que tiene el día de arruinarnos el poco sol que nos regalo esta mañana.
Justo termino ese tema que no me gusta, y poco a poco me tiro por completa hacia atrás, apoyando todo mi cuerpo como un niño en la arena, total no esta mama para decirme que esto no lo puedo hacer y reprochándome porque no traje una mantita para acostarme; vez una vez mas pienso en lo que dirían porque se que lo harían o se le cruzaría. 
En fin, me detengo un segundo a mirar la cantidad de nubes que parecen tener una forma distinta, pero ninguna se parece a una nube en si.. la cantidad de historias que podes armar con solo mirar el cielo, solo necesitas un par de nubes, y un pequeño hilo de imaginación. 
En este momento veo un intento de oso detrás de una montana blanca y arriba de la cabeza, y una espada... que hace una espada ahí? Se podrá correr? Y me deja lugar para seguir armando la historia.!
Se acuerdan cuando de chicos nos hacían hacer la nube de una forma y no es así? Y si la hacías diferente ya te lo tomaban como algo psicológico? Que loco, a esa maestra nunca la acostaron a ver el cielo, porque la verdad que no sabe lo que se esta perdiendo.
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Pasaron cosas desde lo ultimo que escribí hasta ahora, pasaron tal vez un terribles treinta minutos para que se largara a llover con toda, tampoco con toda, solo un par de gotas, las gotas molestan que te hacen levantarte rápido, cerrar todo y correr a un techo. 
Esto es Dinamarca, de lo bien que estas te puede caer un copo de nieve o tal vez oscurecerse porque pinto...
Ya me queda un par de paradas nada mas hasta casa. Y cierro este día con todo esto que viví y disfrute, escribí, pensé y recordé.